Capítulo 4: Rediseña tu Entorno

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Bien, capítulo número 4.

Ayer vimos que los malos hábitos tienen una raíz:

• o Emocional

• o Ambiental

• o por falta de Propósito

Y vimos por encima el cómo resolver las emociones negativas que provocan los malos hábitos.

Hoy nos toca ver el siguiente punto. Los factores ambientales del entorno.

Verás, en nuestro cerebro existe una pequeña parte llamada el tálamo. La función del tálamo es un poco compleja, pero voy a intentar simplificártela al máximo.

El tálamo es la parte de nuestro cerebro que está conectada a nuestras entradas sensoriales (vista, oído, olfato, gusto y tacto) y está encargada de filtrar los estímulos sensoriales importantes de los que no son importantes.

• Los que son importantes, los deja pasar a la consciencia → y les prestamos atención

• y los que no son importantes no los deja pasar a la consciencia → los ignoramos

Te voy a poner un ejemplo:

Cuando vas por la calle tus ojos ven que el cielo es azul, pero tu cerebro no le presta atención. ¿Por qué? Porque es algo que ya sabemos y conocemos y que no es relevante para nosotros. Entonces el tálamo lo ignora y no le prestamos atención.

Cuando vas por la calle tus ojos ven que hay un perro de color morado, tu cerebro inmediatamente se fija en ello y le presta atención. ¿Por qué? Porque es una información inusual e importante. El tálamo considera que es fundamental que prestemos atención a eso y pasa la información a nuestra consciencia.

¿Entiendes como funciona?

Perfecto. Pues ahora necesito que entiendas esto.

Cuando nosotros desarrollamos un mal hábito, con el tiempo nuestro tálamo empieza a volverse hipersensible a los estímulos sensoriales relacionados con el mal hábito.

Por ejemplo:

Si tu mal hábito es comer mal → Tu tálamo se va a volver un prodigio en identificar los olores, colores e imágenes de tu comida favorita y avisarte de ello.

Si tu mal hábito es el móvil → Tu tálamo se va a volver un prodigio en identificar los sonidos, las vibraciones y las notificaciones de tu móvil y avisarte de ello.

Si tu mal hábito es la pornografía → Tu tálamo se va a volver un prodigio en identificar mujeres, desnudos y cuerpos insinuantes y avisarte de ello.

En resumen, si has estado teniendo un mal hábito durante cierto tiempo, eso significa que has estado entrenando tu tálamo para buscar y encontrar ese mal hábito donde sea y cuando sea.

Dependiendo de tu mal hábito siempre que vibre o suene un móvil, aparezca una tía atractiva o alguien esté cocinando, por ejemplo, vas a ser el primero en saberlo porque tienes un tálamo que NO DEJA PASAR UNA.

Y cada vez que detectas el estímulo, ocupa tu mente, no puedes parar de pensar en ello y acabas cogiendo el móvil, metiéndote a esa página prohibida o saltándote la dieta.

Has entrenado a tu tálamo para sabotearte. Y si ignoras tu entorno e ignoras tu tálamo, entonces tus probabilidades de superar tu mal hábito son de casi 0%.

¿Queda claro?

Perfecto.

Si has estado siguiendo el ejercicio de “la ficha de reincidencias” a estas alturas, sabrás más o menos cuáles son los elementos de tu entorno que desencadenan o facilitan tu mal hábito.

Tal vez es una pastelería por la que pasas todas las mañanas de camino al trabajo.

Tal vez es tu “explora” de Instagram que está lleno de modelos semidesnudas

Tal vez son las notificaciones de Instagram que las tienes activas y cada 2 por 3 salta porque tus amigos/as te están mandando reels

Tal vez son las notificaciones del Clash Royale que te avisan de que tus cofres ya están listos para abrirse

Una vez encuentres cuáles son todos los factores ambientales que desencadenan tu mal hábito, vas a hacerlos:

• Invisibles: Si dejas de pasar delante de la pastelería de camino al trabajo, la pastelería pasará a ser “invisible” y tu tálamo dejará de percibirla

• Inaccesibles: Si dejas tu móvil debajo del colchón de tus padres antes de dormir, no podrás coger el móvil por la noche para scrollear o consumir pornografía. Lo harás inaccesible.

• Imposibles: Si sacas todo el dinero de tu cuenta cuando cobres y se lo das a tu madre o esposa, no tendrás dinero para comer comida basura. Lo harás “imposible”

• Insatisfactorios: Si haces un contrato con tu esposa o hermano donde por cada noche que duermas tarde tienes que pagarle 20 € lo harás insatisfactorio.

Lo que estamos haciendo aquí es rediseñar nuestro entorno de forma que “desentrenemos” nuestro tálamo para dejar de caer en nuestro mal hábito.

Al tálamo no hay que ignorarlo. Es literalmente imposible. Haciéndolo jamás conseguirás resultados.

Al tálamo hay que desentrenarlo y lo conseguirás cambiando completamente tu entorno.

Lo dejamos aquí por hoy inshaAllah, que repito, no quiere saturarte.

Mañana más y mejor.

¿Qué te ha parecido el correo de hoy? Respóndeme a este mail diciéndome qué te ha parecido. Me encantaría leerte.

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