El Segundo Paso: La Claridad

Salamu alaikoum wa rahmatullah

Nos volvemos a ver. Te repito lo mismo que te dije ayer. Este mail va a ser valioso y probablemente largo, así que si solo vienes a curiosear y no te vas a tomar este correo en serio, por favor vuelve por donde has venido y ahórrate la molestia.

Si estás aquí porque estás comprometido con aprender y aplicar para progresar, bienvenido.

Ayer hablamos sobre la primera base para cumplir tus objetivos. La Identidad.

Hasta que no te conviertas en una persona compatible con los objetivos que quieres lograr, no vas a conseguirlos.

¿Y como dijimos que puedes cambiar tu identidad?

• Primero defines el futuro que quieres alcanzar.

• Luego reinterpretas tu pasado para que no te sabotee mentalmente.

• Luego cambias tu presente a través de los estándares con los que vives para no fracasar a mitad de camino.

Si no has leído el primer mail, esto te sonará a chino, así que ve a leerlo primero antes de leer este.

Pues bien. Hoy vamos a hablar sobre la segunda base del progreso. La Claridad.

Hay una frase que leí hace años en un libro de Ryan Holiday que decía:

Y esta frase no puede ser más cierta. Te lo aseguro. Y te lo digo después de 7 años ayudando a musulmanes y musulmanas a cumplir sus objetivos.

La enorme mayoría de la gente que no consigue avanzar en sus vidas hoy en día, no avanza por qué ni siquiera sabe con el mínimo detalle lo que quiere hacer ni lograr.

La incertidumbre y la falta de claridad es la silenciosa epidemia que tiene a la gente de hoy en día con un profundo sentido de “llego tarde, no sé a qué, pero llego tarde y me siento fatal por ello”

Le preguntas al joven musulmán promedio hoy en día que quiere lograr en los próximos 5 años y te dirá cosas como:

• Ponerme en forma

• Tener un negocio exitoso

• Casarme

• Hacer la Hijrah a un país musulmán

Okey… parece que el joven promedio tiene las cosas claras… ¿No?

Pues no.

Cuando llegue el momento de ponerse en forma, no sabrá si quiere ir al gimnasio, o practicar boxeo, o hacer running, o hacer ciclismo, o hacer calistenia…

Cuando llegue el momento de tener un negocio exitoso, no sabrá si vender bienes físicos, o servicios digitales, o aprender una habilidad y trabajar por comisión, o crear contenido…

Cuando llegue el momento de casarse no sabe qué tipo de pareja quiere, ni de donde la quiere, ni cómo la quiere…

Cuando llegue el momento de hacer la Hijrah no sabe a qué país quiere hacerla, ni si quiere ir como empleado o como dueño de negocio, o si más bien quiere ir con ahorros y ya verá ahí que hacer…

Básicamente no sabe nada. Absolutamente nada de claridad.

Sabe que está en la planta baja. Sabe que hay un primer piso. Pero no tiene ni idea de donde están ni de cómo son las escaleras.

¿Te sientes identificado/a verdad?

¿Pues cómo se supone que vas a lograr avanzar hacia tus objetivos si no sabes siquiera en primer lugar cuáles son tus objetivos?

¿Entiendes ahora la frase de Séneca? No hay viento favorable para aquel que no sabe hacia donde navega.

“Perfecto Anas, me queda claro, ¿pero cómo hago para tener claridad sobre mi futuro?”

Sencillo.

Fácil no es. Pero es sencillo.

Papel y boli.

En primer lugar, vas a tener que definir cuál es tu propósito mundanal. Y no, no es un mantra raro de hippies.

Tienes 2 propósitos como musulmán en esta dunya:

• El propósito existencial → El porqué estás en esta tierra → Tu adoración a Allah

• El propósito mundanal → El cómo estarás en esta tierra → Tu rol en la sociedad

Ya sabemos que en esta tierra estamos para adorar a Allah y que todo acabará llegando a un final y seremos juzgados por él, subhanahu wa ta’ala.

Pero hasta que ese momento llegue… ¿Qué estarás haciendo? ¿De qué manera contribuirás a la sociedad a la que perteneces?

Pues eso es tu propósito mundanal.

Nuestro propósito existencial es lo que nos hace a todos iguales.

Nuestro propósito mundanal es lo que nos hace a todos diferentes.

Para encontrarlo tendrás qué:

• Enumerar todas las cosas que se te dan bien → Tus Competencias

• Enumerar todas las cosas que disfrutas → Tus Pasiones

• Enumerar todas las cosas por las que puedes cobrar dinero y ser útil para la sociedad → Tus Servicios

• Enumerar todas las cosas que te gustaría arreglar en el mundo → Tus Soluciones

Una vez tengas la lista hecha y completa, busca un hilo que una las 4 cosas. Busca algo que hagas bien, que disfrutes, que puedas ofrecer a la gente y cobrar por ello y con lo que puedas aportar una solución al mundo.

Ejemplo:

• Competencias: Se me da bien escribir, hablar y convencer

• Pasiones: Me gusta enseñar, ayudar y crear

• Servicios: Puedo mejorar la comunicación de las marcas, empresas y creadores de contenido para que su contenido y publicidad genere más ventas e interacciones.

• Soluciones: Quiero ayudar a la ummah a ser una comunidad más competente, preparada y cualificada.

• Propósito mundanal: Voy a ofrecer servicios de copywriting a empresarios y creadores de contenido para que vendan más con sus mails, blogs y posts. Una vez tenga la suficiente experiencia y autoridad, voy a crear un instituto de comunicación para enseñar estas habilidades a jóvenes musulmanes para que puedan generar sus propios ingresos, potencien sus negocios, puedan formar sus vidas y ayuden a sus familias.

¿Ves?

Eso es un propósito mundanal.

Este ejemplo ha pasado de: “Quiero montar un negocio y hacer la hijrah” a saber exactamente que negocio quiere montar, por qué va a montarlo y qué quiere conseguir con él.

Ahora la dirección es clara. Solo hay que ir despejando el camino. ¿Me sigues?

Pues ahora quiero que tú también hagas lo mismo, y una vez lo hagas vas a crear un plan de acción para tus próximos 2 años.

Quiero que en los próximos 2 años te centres en avanzar hacia ese propósito mundanal, y lo harás a través de 3 objetivos principales.

1 objetivo activo y 2 objetivos pasivos.

Los objetivos activos son los que se consiguen a través de enfoque, estrategia, adaptación y aprendizaje constante. Por ejemplo: Montar un negocio, escribir un libro, aprobar unas oposiciones, crear una aplicación…

Los objetivos pasivos son los que se consiguen a través de hábitos, constancia y estándares sólidos. Por ejemplo: Memorizar el Qur’an, aprender un idioma, ponerse en forma, ahorrar dinero…

Pues coge 1 objetivo activo y 2 objetivos pasivos para los próximos 2 años.

Objetivos grandes. Los que más marquen la diferencia respecto a tu situación actual.

Por ejemplo: De aquí a 2 años estaré generando 15.000 € al mes con mi negocio de comunicación, habré memorizado 15 ahzab del Qur’an y me habré sacado el C1 de Inglés.

Ahora que tienes los 3 objetivos principales para los próximos 2 años, quiero que los uses como referencia para:

• Sacar tus objetivos principales para dentro de 1 año

• Sacar tus objetivos principales para dentro de 6 meses

• Sacar tus objetivos principales para dentro de 3 meses

• Sacar los logros clave que tendrás que cumplir para dentro de 1 mes

• Sacar las tareas que vas a tener que cumplir cada una de las próximas 4 semanas

• Sacar los hábitos que vas a tener que adoptar a partir de hoy mismo para que todo lo anterior se cumpla a tiempo.

Ahora has pasado de saber que quieres dentro de 2 años a saber que tienes que hacer esta semana.

Sé que esta tarea es un poco complicada. Pero usa ChatGPT para que te ayude a planificar todo esto y ve viendo sobre la marcha.

Si haces esto que te acabo de decir, vas a pasar de estar perdido en la vida, a saber en qué quieres convertirte, qué tienes que lograr para convertirte en ello y cómo lo vas a hacer.

Ya no eres víctima de tu propia ceguera.

Una vez hagas esto, habrás sentado la segunda base para tu progreso. La cosa pinta bien.

Dicho esto, no me voy a alargar más.

Lo dejamos por aquí y nos vemos inshaAllah en el mail de mañana.

Pero antes de irte, si este mail te ha resultado de valor, puedes “devolverme el favor” respondiéndome a este correo diciéndome qué te ha parecido. Lo valoraría muchísimo.

Te veo mañana con la siguiente base del progreso. La Consistencia.

Salamu alaikoum wa rahmatullah.