El Tercer Paso: La Consistencia

Salamu alaikoum wa rahmatullah.

Tercer día. Seguimos aquí. Aprendiendo a como cambiar nuestra vida por completo.

Antes de nada, repito lo mismo de siempre, que ya es tradición:

Si vienes a curiosear o a “echar un vistazo” a este mail, puedes cerrarlo tan rápido como lo has abierto y volver a lo que sea que estuvieses haciendo. Si no confías en que pueda aportarte valor y no confías en ti mismo como para que lo apliques, entonces no tiene mucho sentido que sigas aquí.

Si eres del otro tipo de persona, que ya ha leído los otros 2 correos y viene entusiasmado por aprender, tomar nota y aplicar lo que le estoy compartiendo, entonces bienvenido. InshaAllah este correo será otra pepita.

Perfecto. Ya hemos visto el papel fundamental que juega La Identidad y La Claridad a la hora de cambiar tu vida de verdad.

Ahora toca ver la 3ª base del progreso. La Consistencia.

Cuando le pedí a ChatGPT que me definiese la consistencia me dió una definición excelente. Quiero compartirla contigo:

Qué increíble manera de explicar lo que es la consistencia en las acciones.

No tengo nada que añadir, la verdad.

Ahora bien, volviendo a lo que nos incumbe en esta serie de correos. Sin este ingrediente, la consistencia, no vas a lograr nada digno en tu vida.

Y sé que esto es una conversación difícil porque seguramente la disciplina no sea tu punto fuerte… pero tenemos que tenerla.

¿O acaso esperabas que yo te diese un truco secreto o una fórmula mágica para cambiar tu vida sin disciplina ni consistencia?

No quiero que mires a otro lado con esperanzas de que puedas cambiar tu vida sin pasar por este aro. Tienes que hacerlo. Tienes que aceptar “el trabajo aburrido”. No hay de otra.

Ahora bien,

La buena noticia es que la disciplina no tiene por qué ser agotadora, ni sufrida ni imposible.

Las causas de la falta de consistencia son las siguientes, y te voy a decir que tienes que hacer para arreglarlas:

• Problema: No eres disciplinado porque lo que haces sientes que es incoherente o que no tiene sentido. Por ejemplo: No eres disciplinado con tus estudios porque la carrera que estudias la has tomado por descarte o por obligación de tus padres.

  • Solución: Asegúrate de que la vida que vives esté alineada con el propósito que tienes. Para eso lee el segundo mail que envié. Todo lo que hagas y vivas hazlo porque tiene sentido y está alineado con un futuro que deseas.

• Problema: No eres disciplinado porque no sabes como abordar el proyecto que quieres tomar o el cambio que quieres empezar. Tienes un objetivo coherente que tiene sentido para ti, pero no tienes un plan ni un paso a paso accionable que te permita ejecutarlo. Sabes qué quieres, pero no sabes cómo conseguirlo.

  • Solución: Necesitas definir un objetivo a 2 años, 1 año, 6 meses, 3 meses y 1 mes, con tareas semanales y hábitos diarios. Si no lo haces, tendrás un objetivo tan grande que las pequeñas victorias que consigas hoy serán insignificantes comparadas con el gran objetivo y te desilusionarás a los pocos días/semanas. Lee el segundo mail que envié.

• Problema: No eres disciplinado porque tus días no te pertenecen. Cada día tienes emergencias, compromisos, favores y excepciones.

  • Solución: Vas a tener que poner límites, romper compromisos, crear condiciones, alejarte e incluso echar personas de tu vida. Jamás podrás creer ningún tipo de consistencia o cambio en tu vida si no tienes ni voz ni voto en ella. No puedes ser un cuenco de tiempo del que la gente coja sin permiso ni límites.

• Problema: No eres disciplinado porque no tienes un sitio, ni un tiempo, ni una forma predecible y repetible con la que puedas formar el hábito que estás intentando adoptar. Cada día es una improvisación.

  • Solución: Construye predictibilidad en tu vida alrededor de tus hábitos y tus proyectos. Establece lugares, momentos y maneras definidas de llevar a cabo tus hábitos o trabajar en tus proyectos. Tu cerebro tiene que vincular lugares y momentos del día con tareas y acciones concretas y tiene que tener una estructura clara para llevarlas a cabo.

• Problema: No eres disciplinado ni constante porque tus malos hábitos te acaban llevando a dormir tarde, comer mal, usar demasiado el móvil, consumir pornografía, etc. Dejándote sin tiempo, energía, foco o dinero. Pierdes tus recursos a manos de tus malos hábitos y luego ya no te queda nada para dedicar a tus objetivos.

  • Solución: Atento este es el punto más grande, más importante y más difícil ⬇️

Los malos hábitos que tienes solo puedes haberlos adoptado por una o varias de estas 3 razones:

• Porque son una herramienta de regulación emocional que estás utilizando para aliviar tus emociones negativas.

  • Ejemplo: Comes comida basura para dejar de estar ansioso, consumes pornografía para dejar de estar agobiado, escuchas música para dejar de estar enfadado, scrolleas en IG/TikTok para dejar de estar aburrido…

• Porque hay elementos en tu entorno que te están recordando y reforzando el mal hábito.

  • Ejemplo: Notificaciones en el móvil que te avisan de que tus amigos te están mandando reels, notificaciones de UberEats que te dan descuentos para comer mal, mujeres semidesnudas en tu Explora de Instagram que te incitan a ver pornografía, amigos que te recomiendan series que te enganchan y te dejan mirándolas hasta las tantas…

• Porque vives una vida sin propósito y sentido, y como no eres capaz de sentir plenitud con la forma que vives tu vida, usas tus malos hábitos como la única fuente de placer que hace que tu vida se sienta menos “vacía” y dolorosa.

  • Ejemplo: No sabes qué hacer con tu futuro, no sabes en qué eres bueno, no sabes a qué aspirar en la vida, vives en piloto automático y tan pronto tienes un momento a solas con tu propia mente, te ahogas en dopamina barata con tu mal hábito de confianza para no tener que afrontar la miserable vida que tienes.

Si quieres solucionar tus malos hábitos (que probablemente sean una de las cosas que más te frenen) vas a tener que coger tu mal hábito e identificar el cuándo lo haces, cómo lo haces, por qué lo haces y qué intentas conseguir/consigues con ello.

Una vez encuentres la raíz de tu mal hábito vas a tener que ver si se debe a la razón n.º 1, 2 o 3 y vas a tener que solucionarlo.

Bien.

A estas alturas creo que ya te he dado suficiente información como para saber cuál es tu problema y cómo abordarlo.

Si pasas tu vida por la checklist que acabas de ver en este correo y cubres todos estos puntos como dios manda, la consistencia y la disciplina nunca más serán un problema.

Te lo garantizo.

Ya llevamos 3 de 7. Seguro que estás aprendiendo muchísimo.

Ya hemos visto La Identidad, La Claridad y la Consistencia.

Te veo mañana de nuevo. Esta vez será la 4ª base del progreso: La Inmersión

Pero antes de irte, si este mail te ha resultado de valor, puedes “devolverme el favor” respondiéndome a este correo diciéndome qué te ha parecido. Lo valoraría muchísimo.

Salamu alaikoum wa rahmatullah 🫡.