Quedan 5 días

Empieza la cuenta atrás

Para algunas personas, estar orgullosos de sí mismos es un sentimiento que prueban cada día.

Para otras personas, es algo extraño y ajeno. Algo que sienten que no va con ellos.

Y aunque parezca mentira, yo durante prácticamente toda mi vida he estado en la segunda categoría. Y puede que tú, que me estás leyendo, me entiendas.

Vivía con la idea de “buah ya verás cuando llegue el día en el que consiga…

Pero nunca llegaba ese día.

Nunca era la idea de “Hoy ha sido un día superproductivo” o “Alhamdulilah cada día estoy más cerca de mis objetivos”.

Lo que me acompañaba a la cama solo era un profundo sentimiento de culpa y de vergüenza.

Durante años, me miraba al espejo y no me gustaba lo que veía.

Miraba mi horario semanal del trabajo y no me gustaba lo que veía

Miraba mi cuenta bancaria y no me gustaba lo que veía

Mirase donde mirase… no me gustaba lo que veía.

Y créeme, no era por falta de ganas. Yo tenía unas ganas y un deseo increíble de que mi vida cambiase y me convirtiese en la versión que siempre quise ser. Y estoy seguro de que si tú estás en esta misma situación, tampoco será por falta de ganas.

El problema es que aunque tuviese muchísimas ganas y motivación, paradójicamente esas ganas se esfumaban sin previo aviso y no entendía por qué siquiera.

Nunca lograba entenderlo. A menudo me preguntaba: “¿Cómo puede ser que odie tanto mi situación y mi vida, pero aun así sigo sin hacer nada al respecto?”.

¿Te suena?

Tras años de intentos fallidos y de duras lecciones aprendidas, llegué a entender que cambiar mi vida no dependía de mi deseo ni de mis ganas.

Tampoco dependía de mi genética o “de qué pasta estaba hecho

Dependía de mis sistemas y de la manera en la que estructuraba mi vida, mis objetivos y mis acciones.

Dependía de una estructura de vida que no me dejase otra opción más que:

  • Tener objetivos claros y organizados

  • Ser productivo

  • Deshacerme de mis malos hábitos

  • Seguir mis buenos hábitos

  • Detectar los errores que cometía y las trampas que me ponía a mí mismo

¿Y sabes qué?

Conseguí desarrollar ese sistema. Lo llamé Sabeel Al Injaaz (El Camino del Éxito).

Me ha tomado años, muchísimas decepciones y errores e infinidad de vídeos, libros, cursos, pódcasts, plantillas y consejos de otras personas.

Desde que he ido implementando este sistema en los últimos años he crecido mi negocio, hecho Hijrah, cumplido mis objetivos, perdido peso… en fin, todo lo que sentía inalcanzable hace unos años.

Y ahora he sacado este sistema con sus principios y fundamentos al público.

Y su precio sube para siempre en 5 días.

Más de 26 lecciones tratando desde como encontrar tu propósito, a cómo estructurar tus objetivos de los próximos 2 años, a como maximizar tu productividad, a cómo eliminar tus malos hábitos y como construir los buenos hábitos que necesitas. Todo lo que me ha llevado a donde estoy hoy en día. TO-DO.

Además de eso, entrarás en un sorteo entre los 100 primeros integrantes del curso para una sesión privada 1 a 1 conmigo, donde analizaré tu situación y diseñaremos un plan de acción personalizado para ti. (De estas 100 plazas para el sorteo solo quedan 40 libres)

Pero es que encima, eso no es todo.

Encima de eso, si adquieres la versión premium tienes también acceso a:

  • Mi sistema de hifdh de Qur’an

  • 4 llamadas grupales donde trataremos todos estos puntos

  • 3 meses gratis de la comunidad privada de Jaami’at Al Qabilah (donde tendrás disponible 2 cursos más, decenas de resúmenes de libros que me han ayudado a progresar en mi vida y 12 sesiones en directo a las que podrás asistir)

Al curso de Inteligencia Emocional entraron 400 personas.

A esta nueva formación ya van más de 60 personas (en 2 días)

Y solo quedan 5 días para que el precio de todo esto se dispare para siempre y nunca más vuelva a bajar.

Y también, en 5 días, la versión premium desaparecerá para siempre

Es tu momento.

Yo más no puedo decir.

Te veo dentro (o no)