Notas Mentales: Cómo Tener una Determinación de Acero

Salamu alaikoum wa rahmatullah

Hoy vengo a darte un consejo que espero que apliques desde hoy hasta el día en el que te mueras si quieres que de verdad te vaya bien en la vida.

Si algo diferencia a las personas que son terriblemente exitosas y las personas que son horriblemente mediocres es la determinación que tienen por sus objetivos.

Las personas exitosas son tenaces y obsesivas. Cuando muerden no sueltan. Se comprometen de verdad.

Las personas mediocres son… yo qué sé, ¿optimistas? No sé, eso en el mejor de los casos. Se ponen objetivos para sentirse mejor consigo mismos, pero nunca se comprometen de verdad.

Y si te soy completamente sincero yo era de los segundos y entendiendo lo que te voy a explicar hoy me volví de los primeros.

Mis objetivos ya no son negociables. EN ABSOLUTO. Me da absolutamente igual que me falten habilidades, que no tenga contactos o que sea casi imposible.

Antes o después lo voy a conseguir, y estoy absolutamente convencido de que lo voy a conseguir y nadie me saca de esas.

Y cómo conseguir esta tenacidad que te obliga a actuar hacia tus metas es lo que quiero enseñarte hoy.

Si quieres estar realmente convencido de que vas a conseguir lo que te propones, necesitas hacerte estas preguntas cuando vayas a plantear un objetivo:

1. ¿Es materialmente posible conseguir esto? ¿Es objetivamente viable? ¿Ha habido personas que lo han conseguido antes que yo? ¿Permite Allah conseguir este objetivo o recurrir a los medios que llevan a él?

2. ¿Necesito o deseo realmente conseguir este objetivo? ¿Es algo que realmente quiero en mi vida?

Ya está.

Si la respuesta a esos dos puntos es sí, no tienes ninguna excusa sobre la faz de esta tierra para no perseguir ese objetivo hasta los confines de tu vida (o hasta que tengas razones de peso para cambiar de objetivo). NIN-GU-NA.

Y sé lo que vas a pensar;

“Vale bien, pero hay otras cosas a tener en cuenta. Como las circunstancias, por ejemplo. Igual no tengo talento, igual no tengo contactos, igual mi familia no tiene dinero, igual vivo en un país donde no existe ese mercado…”

Y aquí hermano/a. Aquí es exactamente donde parten caminos los exitosos y los mediocres.

Justo aquí es donde se marca la diferencia entre los determinados y los deterministas (pequeño juego de palabras pa’ los listos)

Las circunstancias que tú tengas. Como tu peso, tu físico, tu nivel de conocimiento o habilidades, tu red de contactos o el nivel socioeconómico de tu familia son (agárrate a la silla) factores modificables, no factores determinantes.

ES DECIR:

Lo que hacen los exitosos es cambiar el presente que viven para que encaje con el futuro al que aspiran.

Lo que hacen los mediocres es cambiar el futuro al que aspiran para que encaje con el presente que viven.

BOOM 🤯

¿Y sabéis eso por qué pasa?

Porque los exitosos entienden que el futuro que quieren no es negociable y que el presente que viven es modificable.

Los mediocres piensan que el futuro que quieren es negociable y que el presente que viven no es modificable.

Eso que acabáis de leer es la causa de que haya una brecha tan ridículamente grande en la sociedad entre personas superexitosas y personas supermediocres.

Es la diferencia que me hizo pasar de ser una persona que cambiaba de objetivos cada 6 meses a una persona que está obsesivamente comprometida con su objetivo.

Es la lección que quiero que entiendas, interiorices y apliques a partir de ahora para cumplir lo que te propones.

Más pronto o más tarde. Pero que lo acabes cumpliendo.

Dicho esto, hasta aquí llegan estas notas mentales.

Te veo en la próxima. Salamu alaikoum.

P.D: Si quieres aprender a planificar, organizar y (sobre todo) cumplir tus objetivos, aquí te dejo Sabeel Al Injaaz.